miércoles, 8 de junio de 2016



LA HERMANA DORIS ES LA ÚLTIMA DE UN LINAJE DE MUJERES Y MONJAS CERVECERAS CUYA TRADICIÓN, AL MENOS EN ALEMANIA, SE REMONTA A LA EDAD MEDIA





Mallersdorf-Pfaffenberg es un municipio de Baviera en el sur de Alemania, con una población de alrededor de 7.000. Es también el sitio de la Abadía Mallersdorf, donde la cerveza se produjo por primera vez en el siglo 12 por los monjes benedictinos, para los que la cerveza era una alternativa segura por que el agua no era potable  . tradición cervecera de la abadía se reanudó en 1881, y durante los últimos 45 años, ha continuado bajo la cuidadosa elaboración artesanal de la hermana Doris Engelhard de 65 años  maestra cervecera la Elaboración de la cerveza es su manera de servir a Dios a la gente,la ultima de su linaje pero no la ultima monja  cervecera .


Y es que la relación entre las instituciones religiosas y la preparación de cerveza data de la Edad Media, por lo menos del siglo XII, cuando los monjes y monjas preparaban cerveza para consumo propio y para los peregrinos que los visitaban, pues la bebida, además de sus propiedades nutritivas, . A pesar de que la cerveza es una de las bebidas más antiguas de la humanidad, hay restos arqueológicos de mas de 6300 años en Cataluña España, en nuestros días su preparación no se asocia mucho al trabajo femenino; sin embargo, historiadores como Richard Unger (Beer in the Middle Ages and the Renaissance) afirman que la producción cervecera a escala doméstica fue trabajo de mujeres al menos hasta la alta Edad Media, cuando la preparación cambió de ser una industria casera a un sistema de gremios centralizados.
La hermana Doris produce anualmente 80 mil galones de cerveza, utilizando métodos industriales modernos e ingredientes naturales. Algo importante es que no utiliza conservadores, por lo que la cerveza producida en Mallersdorf sólo puede encontrarse en el convento mismo y en las inmediaciones de la remota localidad bávara.
“Quería estudiar agricultura”, recuerda, “pero no era posible en la escuela de la abadía, así que la madre superiora me preguntó si estaría interesada en la cervecera”. La hermana Doris comenzó su aprendizaje en 1966 de la mano de la maestra cervecera anterior, y para 1969 pudo hacerse cargo ella sola, después de completar sus estudios en una escuela técnica local. En la misma fecha tomó los votos eclesiásticos en Mallersdorf.
“Hay 490 hermanas en la abadía, y algunas trabajan como maestras en las escuelas, en hogares para niños y hospitales. También tenemos cocineras, porqueras y una repostera. Todo lo hacemos nosotras. Amo el trabajo, y amo el olor cuando hago cerveza. Y amo trabajar con cosas vivas --la levadura, la cebada y la gente que disfruta la cerveza”.
A pesar de su mala fama, la hermana Doris no cree que la cerveza sea un instrumento del pecado: “Hacer cerveza es ciertamente una profesión curiosa para una mujer, especialmente una monja. Pero amo beber cerveza. La cerveza es la más pura de las bebidas alcohólicas... Es una bebida muy sana, siempre y cuando no te excedas en ello”.
¿Cuál es, según ella, la medida ideal? Para hombres, 1.5 litros, y para mujeres, 3/4 de litro (al día). Por su parte, la monja bebe un vaso diario.
En la abadía se producen diferentes cervezas cada estación. A decir de la hermana Doris, “la cebada es diferente cada año, y debe ser tratada y procesada de diferente manera”. Algunas variedades son la maibock, doppelbock, zoigl oscura y copper-hued lager. “Es un producto fresco. No se supone que la cerveza se deba dejar almacenada. Le cambia el sabor. Debería disfrutarse tan pronto como sea posible”.
Cada quien debe seguir su llamado a donde lo lleve... Para la hermana Doris, el llamado fue el de producir felicidad malteada, alabando a Dios en cada vaso de cerveza.

lunes, 6 de junio de 2016

Por que es mejor beber cerveza

Cerveza , como no destapar tu birra




                                                 El oso soldado que bebía cerveza 




¿Sabías que en la Segunda Guerra Mundial había un oso llamado Wojtek que bebía cerveza y llevaba munición al ejercito polaco?

Wojtek caminaba erguido sobre dos patas y se sentaba en los coches como cualquier humano. De forma temprana abandonó la leche para iniciar una curiosa afición por la cerveza. Wojtek estaba alistado al ejército polaco y tenía toda la documentación necesaria. Una vez terminada la contienda, fueron trasladados a Gran Bretaña, donde el principal atractivo fue dicho oso, que desfilaba orgulloso al frente de sus compañeros por las calles de la ciudad escocesa. Ese fue el gran momento de gloria del que era ya popularmente conocido como el Oso Soldado.

Llegado el momento de la despedida, y los que habían sido sus compañeros deseaban poner a 'Wojtek' en libertad en algún bosque, pero las leyes británicas lo impedían, por lo que se tomó la decisión de enviarlo al zoo de Edimburgo, en donde sería recibido como una celebridad. Allí sus amigos lo visitaban a menudo, saltaban la valla y jugaban con el, pero al final dejaron de hacerlo, y Wojtek acabó muriendo triste y solitario, sin responder a casi ningún estímulo pero reconocido como héroe de guerra.

Hoy en día tiene erigidos monumentos en Londres, Glasgow y Ottawa.


                                                 Beber cerveza motiva tu erotismo 



¿Te gusta la cerveza? Si la respuesta es afirmativa te puede parecer interesante la relación que hay entre este gusto y la disposición de tener intimidad en la primera cita.
Christian Rudder, investigador de la Universidad de Harvard, después de llevar a cabo un estudio, afirma que beber cerveza motiva tu erotismo en la primera cita, sin importar si eres hombre y mujer.
Esta relación puede estar ligada con el concepto de “búsqueda de sensaciones”, que es un rasgo de personalidad, cuya necesidad se basa en disfrutar sensaciones como el sexo y el deseo de correr riesgos físicos y sociales, afirma el investigador.
Reduce tus inhibiciones
Esta investigación se suma a otros estudios que afirman que la primera cerveza crea un efecto relajante y por cada una que bebes aumenta tu habilidad de sociabilizar, reír más y de sentir mayor confianza.
No sólo eso, te anima conquistar al sexo opuesto porque reduce tus inhibiciones, ya que la sola idea beber hace que la autoestima se eleve, afirman investigadores de la Universidad de Tartu en Estonia.
Este hallazgo también se reafirma con el hecho de que al ingerir alcohol la percepción de tu atractivo físico aumenta.
“La belleza está en el que sujeta una cerveza. Las personas que creen estar borrachas también creen que son atractivas”, concluye un estudio de la Universidad de Paris-Descartes de Francia.
Sin embargo, el alcohol mezclado con bebidas energéticas incrementa las posibilidades de tener sexo casual.
Cuando mezcles Red Bull con Vodka o Jägermeister con otra bebida no implica que automáticamente vas a conquistar, pero que sí que estarás más dispuesto a ello, concluye la Investigación de Adicciones de la Universidad de Búfalo.
Esta práctica puede ser muy peligrosa ya que mezclar alcohol con bebidas energéticas es perjudica la salud y puede ser mortal.
Por excelencia, la cerveza es una bebida social y ahora también motivo del sexo casual, pero cuídate de los excesos
Fuente Revista bienestar

Pronto podrás adquirir una máquina capaz de elaborar cerveza artesanal 




Pronto podrás adquirir una máquina capaz de elaborar cerveza artesanal de forma doméstica y sencilla pero con la precisión digital y las recetas de los más prestigiosos cerveceros artesanales.
PicoBrew, la startup con sede en Seattle, ha diseñado Zymatic una revolucionaria impresora 3D que permite elaborar diferentes cervezas a partir de unos sobres bautizados como PicoPaks. Estos incluyen los ingredientes para producir unos 5 litros de bebida, y el precio de cada unidad es de 19 dólares, según su CEO Bill Mitchell. El proyecto ha sido financiado a través de la plataforma de crowdfounding Kickstarter y, a fecha de hoy, sus mentores buscan el patrocinio de una marca cervecera.

El ingenio permite realizar todos los pasos necesarios para fabricar una cerveza con la ventaja de que se lleva a cabo en un mínimo espacio. Todo comienza con la cebada y el lúpulo, que se depositan en unos compartimentos especiales, para que el agua caliente extraiga los azúcares del grano y los aromas del lúpulo, este proceso apenas dura unas 2 horas. 

El mosto así producido se lleva al tanque de fermentación dónde se añade el PicoPak con los ingredientes de la receta. Se deja fermentar durante un periodo de 5 a 7 días a temperatura ambiente, para despues enfriarla. El propio sistema le avisará con una alerta a su teléfono cuando esté listo. También se puede ajustar el grado de amargor y la cantidad de alcohol de la receta al principio del proceso. 

La impresora 3D de cerveza se comercializará a partir de la próxima primavera por un precio estimado de unos 1.000 dólares, pero se ofrece ya en prepedido en Kickstarter por la mitad. PicoBrew venderá sus máquinas y sus PicoPaks a través de los principales minoristas online .
Fuente Muy

Beber cerveza mejora la vida sexual









A diferencia de otras bebidas alcoholicas, cuya ingesta excesiva puede impedir la erección. La cerveza causa el efecto contrario.
El último libro del sexólogo Kat Van Kirk titulado “The Married Sex Solution: A Realistic Guide to Saving Your Sex Life” (Solución al sexo matrimonial: una guía realista para salvar tu vida sexual), expone cuatro valores o efectos positivos de la cerveza para el hombre de cara a sus encuentros sexuales. 
El primer efecto es que la cerveza retrasa la eyaculación precoz gracias a los fitoestrógenos compuestos vegetales parecidos al estrógeno) que contiene, tal y como han confirmado algunos estudios científicos como medio de retrasar el orgasmo. El 8-prenilnaringenina (8-PN) del lúpulo es el más potente fitoestrógeno conocido.
El segundo efecto es que la cerveza (sobre todo la cerveza negra) aumenta la libido y promueve erecciones más largas y también más intensas. Esta consecuencia es producto de los altos niveles de hierro presentes en las cervezas más oscuras y fuertes que aumentan la cantidad de sangre que llega al pene y por ende mejoran la erección.
El tercer efecto positivo es que la cerveza aumenta la resistencia sexual. Así, según un estudio publicado en la revista European Journal of Epidemiology, el 31% de los hombres que bebía cerveza moderadamente tenía menos riesgo de enfermedad cardiovascular en comparación con los que no tomaban esta bebida.
El cuarto efecto es que la cerveza, gracias a la gran cantidad de vitaminas del grupo B y probióticos, “puede ayudar a fortalecer la salud en general y asentar mejor el estómago, por lo que no sentirá pesadez tras beber durante las relaciones sexuales”, explica Van Kirk.
Fuente diario 26

Nace en el Monasterio de San Pedro de Cardeña la primera cerveza trapense de España: 'Cardeña'






El monasterio comenzará a producir en el plazo de dos años en una cervecería propia al igual que los monasterios belgas que han inspirado el proyecto.
El Monasterio de San Pedro de Cardeña, conocido por su pasado cidiano, escribe desde hoy un nuevo capítulo en su historia al ser el primer espacio monacal español en producir cerveza trapense. Un hito, además de un proyecto empresarial, con el que los monjes de la abadía burgalesa pretenden emular a los monasterios belgas y estadounidenses que fabrican algunas de las cervezas más conocidas del mundo.
'Cardeña' da nombre a la primera variedad de cerveza trapense de España y parte de un proyecto gestado por el propio padre abad, el padre Roberto Iglesias, quien hace dos años comenzó a darle vueltas a la idea de producir una cerveza propia. Una realidad que hoy ha sido presentada a los medios de comunicación de la mano de sus promotores, el padre José Luis y el creador de la bebida, Bob Maltman, además del experto cervecero belga Erick Coene.
La comunidad de San Pedro de Cardeña ha tomado la decisión de comenzar un proyecto similar al de abadías “hermanas” que producen cerveza desde hace siglos para ayudar a la supervivencia de la comunidad y afrontar los gastos. Una idea con sello propio inmortalizado en una cerveza que ya puede comprarse en la tienda del monasterio, en el mesón aledaño y que pronto se llevará a algunos espacios de la ciudad basada en la norma trapense de elaboración cervecera. Una fórmula que, según los maestros en este tipo de bebida, hace que las bebida sea “única”.
El proyecto cervecero de San Pedro de Cardeña es único en el país pero sigue la tradición cervecera de la Orden Trapense que comenzara en Bélgica en el siglo XIX. En este país hay actualmente seis monasterios trapenses que elaboran cerveza (Chimay, Westvleteren, Westmalle, Orval, Rochefort y Achel), además de otros dos en Holanda (Koningshoeven/Tilburg y Zundert). Asimismo, hay ejemplos en Austria, Italia, Estados Unidos y en Francia.
“Nuestro monasterio está unido en una asociación trapense y ahora en este proyecto”, destacó el padre José Luis, que mostró su entusiasmo en dar un “paso adelante” y dar vida a un proyecto que busca “conseguir los medios económicos para el mantenimiento de la comunidad y de su patrimonio histórico, además de ayudar a los necesitados”.

Con sello propio. 'Cardeña' es ya una cerveza con sello propio. El cervecero escocés Bob Maltan, maestro cervecero muy experimentado, es quien ha interpretado a la perfección el tipo de cerveza que ahora está ligado a Burgos y a la comunidad de Cardeña. Así ha elaborado una cerveza de estilo trapense belga “con carácter y personalidad, de alta fermentación y con segunda fermentación en botella”.
En los próximos meses se decidirá la comercialización de la bebida, que hasta la fecha puede adquirirse en la tienda anexa al monasterio. Algo que ya han hecho algunas personas que, interesadas, han asistido a la presentación y se han llevado las primeras botellas de 'Cardeña' a sus casas.
A medida que aumente la producción se podrá iniciar la venta a hostelería de Burgos y de la provincia, así como a otros puntos. También puede adquirirse a través de la página web del monasterio, al igual que su famoso vino 'Valdevegón'.
Las primeras cien cajas de 24 botellas de 'Cardeña' se han elaborado fuera del monasterio, en una cervecera artesana española, con exhaustivos criterios. La cantidad ha sido limitada. De cara a los próximos meses se plantea construir una cervecería en el propio monasterio para fabricar la cerveza trapense en la provincia de Burgos.

Pegado a la historia. Para hablar de la existencia de San Pedro de Cardeña es necesario viajar hasta el siglo X, cuando se cree que pudo crearse el monasterio. Los primeros documentos que acreditan su existencia datan del año 902 cuando el conde de Lantarón y de Cerezo, Gonzalo Téllez y su esposa Flámula formalizaron la primera donación al monasterio, aunque se sabe que tres años antes, en el 899, fue restaurado por el rey Alfonso III el Magno. En esta misma época se ubica el martirio de 200 monjes martirizados por los musulmanes. Un triste acontecimiento que hizo que Cardeña se convirtiera en un centro de peregrinación con la afluencia de muchos devotos entre los que las crónicas sitúan al monarca Felipe III.
La llegada de las tropas francesas al monasterio supuso un antes y un después en la historia del cenobio. Napoleón no solo saqueó la tumba del Cid y de su esposa, sino que ordenó quemar buena parte de las dependencias. Un desastre que hizo que documentos, libros como el Beato de Liébana y otras tantas joyas del castellano salieran de Cardeña para nunca más volver. La Desamortización de Mendizábal, en 1836, acabó por dar la puntilla al monasterio desolado y abandonado.
Un siglo después de la desamortización, Cardeña volvió a acoger a moradores. Esta vez eran prisioneros de la Guerra Civil que pasaron los momentos más duros de su estancia en un monasterio convertido en campo de concentración para prisioneros del bando franquista hasta 1940.
Acabada la guerra, y con la presencia del general Franco, Cardeña recobra la vida en 1942. La comunidad trapense se instala en el monasterio y en 1948 logra el título de abadía. Diecisiete años antes, unos meses antes de proclamarse la II República, fue declarado Bien de Interés Cultural.
En pleno siglo XXI, y con 1.100 años a sus espaldas, San Pedro de Cardeña es la morada de 16 monjes trapenses dedicados a la oración y el trabajo, además de a la custodia de una de las leyendas más importantes de la historia castellana, la del Cid Campeador. Desde hoy también es la cuna de una cerveza que espera ser conocida en todo el mundo.